¡QUE MANERAS DE JUGAR, QUE MANERAS DE SOÑAR!!!

España se clasificó el jueves por tercera vez en su historia para una final de la Eurocopa tras vencer en su semifinal a Rusia por 0-3, con goles de Xavi, Güiza y Silva, y se enfrentará el próximo domingo 29 de junio a Alemania.

Han pasado nada menos que dos décadas desde la final perdida en París y desde la que se ganó en 1964 con el mítico gol de Marcelino. España bailó bajo la lluvia a Rusia y mantiene vivo un sueño que empezó a fraguarse en la tanda de penaltis ante Italia y que ayer se materializó en la segunda parte con un fútbol de fantasía que alcanzó su grado de máximo esplendor en el toque de Cesc que sirvió a Güiza para matar el partido con el segundo gol.

Lo peor es la lesión de Villa a la media hora de partido, pero fue volver al esquema de un solo delantero y la selección se apoderó de la pelota para mimarla como nadie. Luis Aragonés ha encontrado un grupo al que nadie cuestionaba su calidad pero que ha aprendido a leer los encuentros y también a competir, dos de las carencias que habían llevado a España a naufragar en las grandes citas. Le pasó en el Mundial de 2006 ante Francia y, desde entonces, la labor de Luis Aragonés ha dado resultado. Se comprobó ante Rusia cuando la selección logró abrir la lata con la conexión Iniesta-Xavi, supo esperar con paciencia su momento para dar la puntilla. Cesc volvió a tomar el mando del encuentro y sólo se arriesgaba el balón si las opciones eran claras. Y, cuando España las vio, se fue a por todas sin dudarlo y remató la faena.

Desde la primera fase se comprobó que este grupo tiene algo distinto. El hat-trick de Villa a Rusia, el gol en el descuento a Suecia, la eliminación de la campeona del mundo... La suerte, que siempre nos daba la espalda, estaba esta vez de cara. Pero nadie llega a una final con suerte. La clase siempre había estado ahí, pero faltaba la fe en sus posibilidades, podemos. Y España se creyó desde su debut que había llegado la hora de cambiar la historia. Sin duda el trabajo de mentalización ha funcionado y ya sólo queda un escalón, el más complicado, para dar la campanada y poner el broche de oro a una Eurocopa memorable.

La regularidad ha sido otro factor clave en el éxito, no ha habido en toda la Eurocopa un error, han rozado la perfección. Puyol y Marchena, los futbolistas más cuestionados, han tenido un rendimiento que ha sido soberbio. Sergio Ramos también se ha enchufado, al igual que Xavi e Iniesta. Senna y Silva siguen inmensos y quizás a Torres le falte un punto de protagonismo, que ha recalado en el gran Cesc Fabregas. Casillas perfecto cuando tiene que aparecer. Juegue el que juegue no se nota en el rendimiento del grupo, son una piña. Cómo disfrutaron todos de la victoria. Cómo disfrutamos todos de la victoria. Nunca en la historia se habia visto jugar tan bien a la selección española, debemos sentirnos orgullosos de este grupo, de éste seleccionador. Es un placer ver jugar a este equipo, que NO SE ACABE NUNCA ESTA EUROCOPA!!!!!!